Este mundo está diseñado de forma irrevocable: unos lo diseñan y rediseñan de forma continua, en la sombra sin duda. Son los arquitectos, los delineantes, los que definen la estructura matriz y colocan las claves de bóveda del sistema-mundo en el cual nacemos, vivimos y morimos, todos y cada uno de nosotras/os.
Realmente no son ciertas todas esas hiper-manidas conspiraciones judeo-masónicas, illuminati baviéricas, y el cada vez más largo y de moda etcétera que podemos manejar en la coyuntura de eventos actual. Nada más lejos de la realidad. A punto de terminar la lectura de la última novela de Umberto Eco, ' El cementerio de Praga', me doy cuenta de la única y cruda verdad: el mundo es como es, y lo más fácil y práctico es echarle las culpas, descargar el odio, la ira... y todo ese tipo de sensaciones prácticas y eficaces en el día a día, al primero que se ponga por delante, con cualquier argumento sin pies ni cabeza. Y es que, cuanto más grande sea la mentira, más público será el que la crea, y sin menor pie a dudas. El caso es que después de haber leido y escuchado sobre todo tipo de teorías referentes a las vicisitudes históricas que han ido llevando al mundo a acabar enquistándose en el sistema mundo actual, como por ejemplo, que los grandes capitales judíos de la alemania pre-nazi, subieron a Hitler al poder, que si la cada vez mayor cantidad de personas que no necesitan a un dios para poder vivir tranquilos/as y plenos/as es una maniobra de los judíos que viene plenificándose desde décadas antes a la Revolución francesa ( evento histórico, por cierto, que fue también, supuestamente, urdido, diseñado, financiado, hostigado por los 'nuevos ricos' de la época, es decir toda la nueva burguesía industrial que va aumentando y acumulando cada vez más cantidades y cuotas del sistema productivo de los crecientes estados-nación sometidos a los dictados de la revolución industrial... Puede que este último argumento tenga cierta coherencia, no digo que no, pero de ahi a echar la culpa de todo a los judíos ( y realmente no puedo defender a un pueblo sobre el que me reconozco totalmente ignorante, por no conocer ni haber entablado conversación en profundidad con ninguno de sus miembros, al igual que tampoco puedo atacarlo ) pienso que lo que denostan tal tipo de acciones no es más que una visión en extremo reduccionista de las cosas, de la vida en general. Tratar de argumentar que los judíos fueron los creadores de la Revolución francesa es, como decía, un argumento reduccista, además de vulgar para cualquier cráneo vivo que contenga, al menos, algo de tejido neuronal no atrofiado ni enfermizo ( como ha estado el mío durante tantos años, y tantos... )
Lo que quiero decir, resumiendo, es que, tristemente, el ser humano, en su naturaleza, es sumamente manipulable, o mejor, somos extremadamente impresionables, elemento el cual nos lleva al fácil movimiento a distancia y por parte de terceros (arquitectos, que decíamo más arriba) de nuestras psiques y de nuestros esquemas, modos, hilos, y demás procesos de pensamiento, y lo más importante, de sentir y emocionarse.
¿ Para que sirven todas esas teorías sobre que el imperio Yanki quiere gobernar el mundo, sobre que el mundo está controlado por dos o trs familias, coincidentemente de raices semíticas, etc. etc. etc. ? Y desde el poco tiempo que ha pasado entre que mi querido lector haya leido poca más arriba el anterior etcétera y éste, la lista de teorías conspiratorias ha aumentado en no pocos órdenes de magnitud. Y bien, me pregunto yo, ¿ qué es lo más fácil en esta vida, y lo que hacemos siempre ? Por supuesto, mis queridos/as, lo más fácil, rápido, en suma, práctico, es echarle la culpa a los demás de todos los males existentes existidos y por existir. Por supuesto, que el mundo está en manos de los que controlan la gran masa del capital mundial, es una obviedad tan evidente que hasta resulta insutante decirlo para una mente que utilice un número mínimo de su tejido neural. Para entender esto último no es necesario hacer un máster en teorías conspirativas. Es estúpido y absurdo perder el tiempo hablando de quien controla el mundo y quien está por encima y por encima del que está por encima, y por encima... Lo que quiero decir es que es absurdo seguir las vácuas modas de esta humanidad que, en el momento actual de la historia, nunca se había visto, y espero que nunca se vea en épocas futuras , tan sumida y abyecta en tal vacuidad moral, intelectual (por hacer ostentación en realidad del más estúpido y aparente pseudo-intelectualismo)... En suma, hundidos tod@s en tal decadencia, degeneración sistemática, deterioro hiperprogresivo, de todos los elementos que son los que realmente nos deben dar nuestra identidad de seres humanos, y no de zombies(y nosólo por la moda, aunque también) alienados al sistema, humanos deshumanizados que sólo nos alimentamos de vacío constante servido en bandejas de plata, pero más vacías y frías que el espacio interestelar. Aunque desde luego si seguimos así de burros y de gilipollas, dudo que existan tales épocas futuras, y no por una guerra nuclaer mundial ni gilipolleces de esas, si no porque el borreguismo exponencial in crescendo de la raza humana nos llevará al más brutal colapso cerebral que haya sufrido nunca cualquier individuo de la humana especie (que por cierto, sólo goza de una raza, no como quieren argumentar tantos y tantos seudo-snobs seudo-intelectuales seudo-científicos... Seudodetodo, incluso pseudos en su pseudeidad).
El mundo va como va y punto, y son pocos los que reconoceremos que es culpa de nosotros mismos, única y exclusivamente, y de nadie más. Si queridos niños y niñas, la culpa es vuestra, y mía también. Lo único que voy a sonseguir con ésto serán, como mínimo, malas caras. Pero eso no hace a la verdad menos cierta. ¿ Por qué la culpa es nuestra ? Porque mientras andamos jodiendo, es decir tocándonos los órganos genitales espatarrados en un sofá... Fundamentalmente: siempre que hacemos culpables a otros que no seamos nosotros mismos de los problemas tanto nuestros como del mundo, estamos comportándonos como lo que realmente somos, y eso es, unos vagos/as de mierda. Cuan práctico resulta comentar con los amig@s que el mundo se va a la mierda, por culpa de quien sea, y que no hay solución, porque está lleno de hij@s de prostíbulo, y que entonces la vida resulta ser una mierda dura y jodida que hay que saber tragar, o cagar, o lo que más os guste, me da igual. El caso es, y para concluir, que me recuerda mucho esto último a un pensamiento que a día de hoy y desde haberlo descubierto, me sigue haciendo mucha gracia, pero de la buena, mi querid@ lector/a. Y el pensamiento versa sobre todos aquellos, me incluyo por supuesto, que teorizamos sobre los demás, utilizando normalmente la palabra 'gente' en nuestras expresiones teóricas que compartimos, totalmente enorgullecidos, envalentonados, etc. por nuestra grande, nueva y compleja deducción, producto de nuestra gran agudeza observativa y analítica, con nuestros querid@s interlocutores, compañeros de frivolidades varias, que nos empeñamos en llamar ocio, pero que no entendemos, o sencillamente no queremos entender, que lo único que comprenden son ociosidad. Si, querid@ lectora/or, que grandes pensadores somos todos aquellos que hacemos teorías del tipo: - Si es que la gente... La gente es gilipollas. Ó: - La gente prefiere tener la mente tranquila sin pensar en las cosas realmente importantes. Ó: - Buah, como es la gente, si es que... Asi va el mundo... Si es que, anda que como flipa la gente.
Pues si, mis querid@s amig@s [ o no...], yo mismo soy un teórico de la gente, para la gente, con la gente, incluso por la gente. Pero, ¿ acaso yo no soy gente ? O quien sabe, quizás un agente... de algo, quien sabe qué.
¿Porqué no, entonces, reconocer mi verdadera identidad de gilipollas? ¿ Es qué no soy gente ? ¿Entonces que demonios soy? No sigamos con las bromas, querido/a: estoy empezando a asustarme. Seguridad, mi querido escritor ( ¡cuanta vanidad! ), utiliza la lógica y el sentido común, entre otras cosas que no utilizas normalmente en el transcurso del día, y di conmigo las siguientes palabras, primero como buen teórico de la gente, luego como buen teórico de ti mismo, para luego concluir con ambas tendencias anglófobas... Quiero decir... Viva la Commonwealth !! Pues bien, di entonces, mi querido proyecto de literato ( ¡ dejemos ya los narcisismos, demontre! ), di lo siguiente, y evita así el seguir encharcando el suelo con el producto de la suelta de tus esfínteres: - Si es que... si es que la gente mira, no se enteran. Aquí cada uno va a su royo, nadie escucha a nadie, todo el mundo o mejor, la gente, va a su puta bola. La gente se piensa que su forma de ver las cosas es la mejor y la verdaderamente acertada. Si es que la gente es gilipollas... Pues bien, yo también soy gente ( aquí empieza el segundo tono), y por lo tanto, también debo ser gilipollas. ¿ Y porqué no reconocerlo, ya que es una consecuencia lógica ? O, al menos si yo no quiero admitir la cruda realidad, y ésta es que soy un completo inepto, deberé actuar en consecuencia y no permitirme el por otra parte gustoso y placentero ejercicio de llamar gilipollas a una gran mayoría de los borregos que habitan este moralmente infecto y decrépito planeta, o mejor, gente. Pero, como me resulta prácticamente imposible el evitar uno de los actos que mayores satisfacciones le reporta a mi alma( tanto así que se podría decir que en ocasiones me llega a caber una sandía por el ano, o como mi querido, aunque no amigo, Camilo José Cela, el cual era capaz de absorver del orden de dos litros del acuático fluido por la 'recta' vía), pues yo mismo me incluyo en lo que, por otro lado, es más cierto que lo contrario, que sería el no incluirme en un grupo masivo de borregos con tendencia a la autoinducción de la más abyecta estupidez superlativizada por el más estúpido narcisismo auto-ególatra. ( Si, me gusta inventar nuevas palabras y conceptos)
Besos a tod@s ( sin ironizar ). Debo dejaros/as, ya que estoy escuchando, en este preciso instante, la llamada megafónica del vendedor de melones que, no es baladí decirlo, lleva su tienda motorizada sobre el chasis de una camioneta. MMMMM, qué jugosa pinta tienen esos deliciones melones. Un mordisco, a los melones, como primer acercamiento, no estará mal.
Es la hora, os abandono. Eso si, y ésto es importante decirlo: los besos, donde vosotr@s queráis. Aunque sin duda, habrá ciertas proposiciones que deberé declinar, aunque sólo sea por aquello del decoro.
Realmente no son ciertas todas esas hiper-manidas conspiraciones judeo-masónicas, illuminati baviéricas, y el cada vez más largo y de moda etcétera que podemos manejar en la coyuntura de eventos actual. Nada más lejos de la realidad. A punto de terminar la lectura de la última novela de Umberto Eco, ' El cementerio de Praga', me doy cuenta de la única y cruda verdad: el mundo es como es, y lo más fácil y práctico es echarle las culpas, descargar el odio, la ira... y todo ese tipo de sensaciones prácticas y eficaces en el día a día, al primero que se ponga por delante, con cualquier argumento sin pies ni cabeza. Y es que, cuanto más grande sea la mentira, más público será el que la crea, y sin menor pie a dudas. El caso es que después de haber leido y escuchado sobre todo tipo de teorías referentes a las vicisitudes históricas que han ido llevando al mundo a acabar enquistándose en el sistema mundo actual, como por ejemplo, que los grandes capitales judíos de la alemania pre-nazi, subieron a Hitler al poder, que si la cada vez mayor cantidad de personas que no necesitan a un dios para poder vivir tranquilos/as y plenos/as es una maniobra de los judíos que viene plenificándose desde décadas antes a la Revolución francesa ( evento histórico, por cierto, que fue también, supuestamente, urdido, diseñado, financiado, hostigado por los 'nuevos ricos' de la época, es decir toda la nueva burguesía industrial que va aumentando y acumulando cada vez más cantidades y cuotas del sistema productivo de los crecientes estados-nación sometidos a los dictados de la revolución industrial... Puede que este último argumento tenga cierta coherencia, no digo que no, pero de ahi a echar la culpa de todo a los judíos ( y realmente no puedo defender a un pueblo sobre el que me reconozco totalmente ignorante, por no conocer ni haber entablado conversación en profundidad con ninguno de sus miembros, al igual que tampoco puedo atacarlo ) pienso que lo que denostan tal tipo de acciones no es más que una visión en extremo reduccionista de las cosas, de la vida en general. Tratar de argumentar que los judíos fueron los creadores de la Revolución francesa es, como decía, un argumento reduccista, además de vulgar para cualquier cráneo vivo que contenga, al menos, algo de tejido neuronal no atrofiado ni enfermizo ( como ha estado el mío durante tantos años, y tantos... )
Lo que quiero decir, resumiendo, es que, tristemente, el ser humano, en su naturaleza, es sumamente manipulable, o mejor, somos extremadamente impresionables, elemento el cual nos lleva al fácil movimiento a distancia y por parte de terceros (arquitectos, que decíamo más arriba) de nuestras psiques y de nuestros esquemas, modos, hilos, y demás procesos de pensamiento, y lo más importante, de sentir y emocionarse.
¿ Para que sirven todas esas teorías sobre que el imperio Yanki quiere gobernar el mundo, sobre que el mundo está controlado por dos o trs familias, coincidentemente de raices semíticas, etc. etc. etc. ? Y desde el poco tiempo que ha pasado entre que mi querido lector haya leido poca más arriba el anterior etcétera y éste, la lista de teorías conspiratorias ha aumentado en no pocos órdenes de magnitud. Y bien, me pregunto yo, ¿ qué es lo más fácil en esta vida, y lo que hacemos siempre ? Por supuesto, mis queridos/as, lo más fácil, rápido, en suma, práctico, es echarle la culpa a los demás de todos los males existentes existidos y por existir. Por supuesto, que el mundo está en manos de los que controlan la gran masa del capital mundial, es una obviedad tan evidente que hasta resulta insutante decirlo para una mente que utilice un número mínimo de su tejido neural. Para entender esto último no es necesario hacer un máster en teorías conspirativas. Es estúpido y absurdo perder el tiempo hablando de quien controla el mundo y quien está por encima y por encima del que está por encima, y por encima... Lo que quiero decir es que es absurdo seguir las vácuas modas de esta humanidad que, en el momento actual de la historia, nunca se había visto, y espero que nunca se vea en épocas futuras , tan sumida y abyecta en tal vacuidad moral, intelectual (por hacer ostentación en realidad del más estúpido y aparente pseudo-intelectualismo)... En suma, hundidos tod@s en tal decadencia, degeneración sistemática, deterioro hiperprogresivo, de todos los elementos que son los que realmente nos deben dar nuestra identidad de seres humanos, y no de zombies(y nosólo por la moda, aunque también) alienados al sistema, humanos deshumanizados que sólo nos alimentamos de vacío constante servido en bandejas de plata, pero más vacías y frías que el espacio interestelar. Aunque desde luego si seguimos así de burros y de gilipollas, dudo que existan tales épocas futuras, y no por una guerra nuclaer mundial ni gilipolleces de esas, si no porque el borreguismo exponencial in crescendo de la raza humana nos llevará al más brutal colapso cerebral que haya sufrido nunca cualquier individuo de la humana especie (que por cierto, sólo goza de una raza, no como quieren argumentar tantos y tantos seudo-snobs seudo-intelectuales seudo-científicos... Seudodetodo, incluso pseudos en su pseudeidad).
El mundo va como va y punto, y son pocos los que reconoceremos que es culpa de nosotros mismos, única y exclusivamente, y de nadie más. Si queridos niños y niñas, la culpa es vuestra, y mía también. Lo único que voy a sonseguir con ésto serán, como mínimo, malas caras. Pero eso no hace a la verdad menos cierta. ¿ Por qué la culpa es nuestra ? Porque mientras andamos jodiendo, es decir tocándonos los órganos genitales espatarrados en un sofá... Fundamentalmente: siempre que hacemos culpables a otros que no seamos nosotros mismos de los problemas tanto nuestros como del mundo, estamos comportándonos como lo que realmente somos, y eso es, unos vagos/as de mierda. Cuan práctico resulta comentar con los amig@s que el mundo se va a la mierda, por culpa de quien sea, y que no hay solución, porque está lleno de hij@s de prostíbulo, y que entonces la vida resulta ser una mierda dura y jodida que hay que saber tragar, o cagar, o lo que más os guste, me da igual. El caso es, y para concluir, que me recuerda mucho esto último a un pensamiento que a día de hoy y desde haberlo descubierto, me sigue haciendo mucha gracia, pero de la buena, mi querid@ lector/a. Y el pensamiento versa sobre todos aquellos, me incluyo por supuesto, que teorizamos sobre los demás, utilizando normalmente la palabra 'gente' en nuestras expresiones teóricas que compartimos, totalmente enorgullecidos, envalentonados, etc. por nuestra grande, nueva y compleja deducción, producto de nuestra gran agudeza observativa y analítica, con nuestros querid@s interlocutores, compañeros de frivolidades varias, que nos empeñamos en llamar ocio, pero que no entendemos, o sencillamente no queremos entender, que lo único que comprenden son ociosidad. Si, querid@ lectora/or, que grandes pensadores somos todos aquellos que hacemos teorías del tipo: - Si es que la gente... La gente es gilipollas. Ó: - La gente prefiere tener la mente tranquila sin pensar en las cosas realmente importantes. Ó: - Buah, como es la gente, si es que... Asi va el mundo... Si es que, anda que como flipa la gente.
Pues si, mis querid@s amig@s [ o no...], yo mismo soy un teórico de la gente, para la gente, con la gente, incluso por la gente. Pero, ¿ acaso yo no soy gente ? O quien sabe, quizás un agente... de algo, quien sabe qué.
¿Porqué no, entonces, reconocer mi verdadera identidad de gilipollas? ¿ Es qué no soy gente ? ¿Entonces que demonios soy? No sigamos con las bromas, querido/a: estoy empezando a asustarme. Seguridad, mi querido escritor ( ¡cuanta vanidad! ), utiliza la lógica y el sentido común, entre otras cosas que no utilizas normalmente en el transcurso del día, y di conmigo las siguientes palabras, primero como buen teórico de la gente, luego como buen teórico de ti mismo, para luego concluir con ambas tendencias anglófobas... Quiero decir... Viva la Commonwealth !! Pues bien, di entonces, mi querido proyecto de literato ( ¡ dejemos ya los narcisismos, demontre! ), di lo siguiente, y evita así el seguir encharcando el suelo con el producto de la suelta de tus esfínteres: - Si es que... si es que la gente mira, no se enteran. Aquí cada uno va a su royo, nadie escucha a nadie, todo el mundo o mejor, la gente, va a su puta bola. La gente se piensa que su forma de ver las cosas es la mejor y la verdaderamente acertada. Si es que la gente es gilipollas... Pues bien, yo también soy gente ( aquí empieza el segundo tono), y por lo tanto, también debo ser gilipollas. ¿ Y porqué no reconocerlo, ya que es una consecuencia lógica ? O, al menos si yo no quiero admitir la cruda realidad, y ésta es que soy un completo inepto, deberé actuar en consecuencia y no permitirme el por otra parte gustoso y placentero ejercicio de llamar gilipollas a una gran mayoría de los borregos que habitan este moralmente infecto y decrépito planeta, o mejor, gente. Pero, como me resulta prácticamente imposible el evitar uno de los actos que mayores satisfacciones le reporta a mi alma( tanto así que se podría decir que en ocasiones me llega a caber una sandía por el ano, o como mi querido, aunque no amigo, Camilo José Cela, el cual era capaz de absorver del orden de dos litros del acuático fluido por la 'recta' vía), pues yo mismo me incluyo en lo que, por otro lado, es más cierto que lo contrario, que sería el no incluirme en un grupo masivo de borregos con tendencia a la autoinducción de la más abyecta estupidez superlativizada por el más estúpido narcisismo auto-ególatra. ( Si, me gusta inventar nuevas palabras y conceptos)
Besos a tod@s ( sin ironizar ). Debo dejaros/as, ya que estoy escuchando, en este preciso instante, la llamada megafónica del vendedor de melones que, no es baladí decirlo, lleva su tienda motorizada sobre el chasis de una camioneta. MMMMM, qué jugosa pinta tienen esos deliciones melones. Un mordisco, a los melones, como primer acercamiento, no estará mal.
Es la hora, os abandono. Eso si, y ésto es importante decirlo: los besos, donde vosotr@s queráis. Aunque sin duda, habrá ciertas proposiciones que deberé declinar, aunque sólo sea por aquello del decoro.
Nunca comento, siempre diría lo mismo, sin comentarios. Como siempre, un maestro en este mundo falócrata. Besos indecorosos
ResponderEliminarPues muy mal por eso de no comentar. Hay que comentar, hay que criticar, para bien y para mal. He de decir, y digo: - Gracias, pues, por tu anomalía comentarística. Por cierto, lo de la falocracia me recuerda mucho al otro día cuando me pararon unos testigos de un tal Jehová ( obladí, obladá, larararalara.. tiriririroriro...) y me hablaron de su reino. Joder, les dije, ese tío si que es un administrador cojonudo, menudo reino tiene. Pero, cuando les pregunté que dónde estaba ese reino, me empezaron a decir cosas realmente raras, apoyados únicamente en un extraño libro cargado de contradicciones y malos propósitos ( incluso de sodomitas, Dios me perdone) y totalmente obcecados en sus idolatrías anti-naturales (que ellos dan en llamar sobre-naturales). Pobres ellos. Cuando me di cuenta de que lo que realmente padecían era una esquizofrenia galopante que no reconocen y que nunca querrán reconocer ( tanto ellos como cualquier otro/a que crea en fantasmas arquitectos o creadores ( joder, yo al menos no soy tan exigente, me bastó con que los fantasmas de Casper fueran unos borrachos juerguistas y no necesité pensar que fueran los creadores de toda la materia y de la vida, sencillente como excusa autosugestionada para quedarme agusto y autoengañarme con el único fin de no querer ver ni aceptar lo que es la vida en si misma). ¿ Qué quiero decir con todo ésto ? Que lo único que diferencia a las personas que están diagnosticadas de esquizofrenia y los que creen en esta serie de fantasmas, que normalmente unifican bajo el nombre de Dios, es que los primeros, pobre e injustamente, han sido catalogados, encasillados como si de un producto se tratara, han sido tachados de algo que no son, porque la esquizofrenia no es una enfermedad, es en realidad una disfunción, un desorden que por lo tanto es reversible. Pero, ¿ Porqué se llega a tales niveles de desorden mental en una persona que padece este tipo de transtornos ( y fijaos bien que no empleo la palabra enfermedad, porque es totalmente criminal legitimar la estrategia que están llevando a cabo las farmaceútica junto con su equipo homicida, que mata, en ocasiones, dulcemente, como en el caso de la mayoría de las medicaciones falsamente vendidas como portadoras de tales o cuales principios pero que en realidad no son más que placebos. El equipo homicida se compone, entre otros, de los tan odiados pero sobre todo amados por nuestra esquizofrénica sociedad, por nuestros loados mata-sanos. Y lo digo por experiencia propia. Si no me creeis, pues seguid tomando vuestras pastillitas. ¿ Cuál toca ahora, mi querido niño/a catorceañero que ya, aparte del tabaco, los cubatillas y demás droguichuelas, te has pasado ya, por prescripcioón médica, a las drogas duras ? Si, amigo, realmente tu, o en realidad tus padres, no le deben tener ningún aprecio a tu vida, ni a la de nadie. O quizás debe ser que tus abuelos tenían aún menor aprecio a los que hpy son tus padres, y por ello les metieron en un colegio católico, no recuerdo si de prelados con pene o con ranura celibal ( por cierto ¿porque no reconocéis ya, gente del clero, que sois las mentes más calientes, lascivas, morbosas... del planeta ). Pero realmente todo viene de más atrás, en realidad ni tus padres, ni tus abuenos , tus bissabuelos, etc etc, tienen la culpa. ¿ sabes quíen tiene la culpa? - ¡ El gobierno, los sudacas, los panchitos, los negros, los chinos, los moros, los políticos, tu madre, mi padre, ese niño que me mira como poseido por extrañas fuerzas diabólicas, el salero que se me rompió el otro día lleno de sal, el hecho de haberme levantado el otro día con el pie izquierdo y luego al ir al espejo haber comenzado por mirarme a los ojos directamente ( rituales obsesivo-compulsivos de los cuales, por cierto, al fin me he liberado.
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